El GEN aboga por demoler las urbanizaciones ilegales |
(Diario de Ibiza, 12/08/2015)
Los ecologistas consideran que hay que «decrecer» porque «no hay ni gota de agua» en la isla
c. roig | ibiza. El grupo ecologista GEN lo tiene claro: hay que empezar a «decrecer» para evitar el «colapso que sufre la isla». «Se tiene que hacer una planificación integral del territorio radicalmente diferente a la de ahora, hay que eliminar la posibilidad de crecimiento», explicó ayer la dirigente y portavoz del GEN Neus Prats, que recordó que este año se cumplen diez años del Plan Territorial Insular (PTI), que habría que modificar porque «una de las cosas que provoca más impacto en las carreteras y colapso de vehículos son las segundas residencias y viviendas vacacionales, no se puede tramitar ni una más, la isla no puede más».
Para los ecologistas, una de las soluciones pasa por «esponjar y demoler el montón de urbanizaciones completamente ilegales que hay en primera línea de mar». Pese a que se trata de una iniciativa que puede sonar radical, Prats aseguró que es la «única cosa inteligente que se puede hacer».
«Nos hemos pasado»
«Es increíble que cuando se plantea una cosa tan obvia suene a ¡uy Jesús! Pero es lo que hay, nos hemos pasado tres pueblos y nos hemos pasado hace días», insistió la ecologista, que señaló que en el campo solo se tendrían que autorizar actuaciones vinculadas a usos tradicionales. «No se puede utilizar como una urbanización más o, como se permite ahora, como una nueva zona turística, esto se tiene que acabar y también se tiene que terminar la posibilidad de seguir construyendo urbanizaciones», agregó.
En cuanto a la proliferación de embarcaciones de recreo en la costa, recordó que hace 20 años que alertan sobre el peligro de los barcos que anclan sobre posidonia. «Hay que ordenar los fondeos en todo el litoral, obligar a todas las embarcaciones a usar una boya ecológica y cuando no se pueda soportar más carga, hay que decir que no se pueden admitir más embarcaciones, que no pueden fondear donde quieran», explicó la dirigente ecologista, que habló también sobre el problema de las aguas residuales de las embarcaciones, que deben ser «recogidas y gestionadas por empresas que den el beneficio a gente de la isla».
«Para cuando nos demos cuenta se habrá hundido el turismo, ahora mismo estamos en un colapso ecológico, sin una gota de agua, hay que tener visión de futuro, algo que nunca se ha tenido», añadió la dirigente ecologista, que cree que hay que «repartir los beneficios de la industria turística», que actualmente están «concentrados cada vez en menos manos».
«Cada vez más pocos son más ricos y hay cada vez más pobres, la industria turística tiene que estar más controlada, no puede ser el despiporre y el descontrol absoluto de ahora», opinó Prats.
El GEN ve bien la propuesta del Consell de limitar la entrada de coches en la isla, pero Prats recordó que para hacer esto hay que mejorar el transporte público porque ahora las paradas de autobús «son freidoras» y «disuasorias». «Hacer más carriles y rotondas es como dar alcohol a una persona con cirrosis», puso como ejemplo Prats, que cree que la idea de crear un foro es positiva, porque la situación ya no es una cuestión «de ideología».