(Diario de Mallorca, 9/11/2010)

Condena al propietario a seis meses de prisión por un delito contra la ordenación del territorio

J.F. MESTRE. PALMA. La Audiencia de Palma, en un recurso planteado por el antiguo fiscal de medio ambiente, Julio Cano, ha condenado al propietario de una vivienda ilegal que levantó en la urbanización de s´Olivaret. El tribunal anula la sentencia absolutoria que dictó una juez de lo Penal e impone una pena de seis meses de cárcel contra el propietario de esta construcción ilegal por un delito contra la ordenación del territorio. La sentencia también le obliga a demoler dicha construcción y a correr con todos los gastos del derrumbe.

El acusado es el propietario de la parcela número 298 de esta urbanización, un terreno que esta calificado de suelo rústico común. La parcela dispone de una extensión de 1.699 metros cuadrados, pero no se puede construir. La sentencia afirma que el propietario construyó una edificación en su parcela entre los años 1995 a 1999 sin contar ni con licencia ni permiso municipal. Esta construcción motivó un expediente sancionador del ayuntamiento de Palma.

Pese a ello, en el año 2002 el dueño volvió a construirse una segunda casa. La vivienda contaba con una planta de 60 metros cuadrados. El celador municipal, al llevar a cabo una inspección por la zona, descubrió que se estaba realizando dicha obra. El funcionario instó su paralización, aunque esta resolución no fue notificada personalmente al acusado. La sentencia afirma que el hombre continuó construyendo y en 2006 concluyó su vivienda.

Los jueces señalan que esta casa forma parte de un núcleo de viviendas ya consolidadas a pesar de que se han levantado en un terreno rústico protegido. Aunque se trata de una urbanización ilegal, s´Olivaret dispone de servicios municipales, como pueden ser la recogida de basura y agua potable que facilitaba la empresa municipal Emaya. Además, los dueños pagan el correspondiente impuesto de bienes inmuebles, a pesar de que sus casas son ilegales.

La juez que dictó la primera sentencia sobre esta construcción ilegal dictó un fallo absolutorio al entender que hay un proyecto para legalizar esta urbanización. La Audiencia, en cambio, discrepa de esta tesis. 

Utilización racional del suelo

El tribunal de la Audiencia de Palma que ha dictado esta sentencia afirma que "la protección del medio ambiente, la preservación de los recursos naturales y la utilización racional del suelo son crecientes preocupaciones de nuestro tiempo, que van calando, a veces con excesiva lentitud, en la conciencia humana".

Los jueces se muestran duros con la reacción municipal a esta proliferación de viviendas ilegales que se ha producido en la urbanización ilegal de s´Olivaret y acusa a Cort de no haber actuado con la suficiente contundencia para impedir esta situación.

El fiscal determinó que, al margen de la condena, es necesario demoler estas viviendas ilegales porque de lo contrario se premia al autor del delito permitiendo que siga disfrutando de esta vivienda construida en un lugar no autorizado.