(Diario de Ibiza, 8/11/2007)

Eivissa | A. M. O.
Un vecino de Sant Joan fue condenado ayer por un delito de desobediencia de carácter leve y al pago de un mes de multa con una cuota diaria de 10 euros por ejecutar unas obras en su domicilio.
El acusado había solicitado al Ayuntamiento de la localidad una licencia de obra menor para realizar unos trabajos en el porche de su vivienda. Sin embargo, cuando acudieron al lugar varios agentes de la Policía Local de Sant Joan constataron que las obras realizadas por este vecino requerían una licencia de obra mayor. En consecuencia, procedieron a la paralización de los trabajos hasta que el propietario subsanara la deficiencia administrativa. Según la Fiscalía, la orden fue desobedecida por el acusado, quien incluso poco tiempo después finalizó las obras. Los agentes de la Policía Local se ratificaron ayer en la denuncia presentada. La juez, de conformidad con la Fiscalía y la defensa, condenó al acusado por un delito de desobediencia leve y al pago de un mes de multa con una cuota diaria de diez euros.