(Diario de Ibiza, 15/09/2007)

Los ayuntamientos también reconocen que acumulan una demora, pero Sant Antoni considera que la denuncia de los arquitectos es «exagerada». Todos apuestan por reforzar las plantillas de Urbanismo

EIVISSA | EUGENIO RODRÍGUEZ. El Consell de Eivissa y los ayuntamientos de la isla admiten que la tramitación de licencias de obras acumula un cierto retraso y que, en algunos casos, se incumplen los plazos legales marcados por normativa propia, tal y como ha denunciado públicamente la Demarcación de Eivissa y Formentera del Colegio Oficial de Arquitectos.

El conseller de Ordenación del Territorio, Miquel Ramon, reconoce que la tramitación de obras en suelo rústico, que depende de la autorización de la Comisión Insular de Urbanismo y Patrimonio (Ciothupa), acumula «mucho retraso», pero apunta que se está trabajando para mejorar la situación. Por ello, el Consell está a la espera de la contratación de un segundo arquitecto para reforzar la plantilla de este departamento. «Ha de haber más gente para redactar los informes», dice. Ramon también da la razón a los arquitectos cuando se refieren a la «disgregación y complejidad» de la normativa urbanística y a las contradicciones entre el Plan Territorial Insular (PTI) y los planeamientos urbanísticos de los municipios, que aún no se han adaptado a la norma marco. «El Consell ofrece su ayuda a los municipios para tratar de resolver este problema», explica.

El Ayuntamiento de Eivissa considera que para paliar los retrasos denunciados por los arquitectos se debería reforzar y reciclar continuamente la formación de la plantilla, dado el volumen de normativa urbanística que aprueban las administraciones. «Nosotros estamos trabajando en esta línea», afirma Torres, que asegura que «se intenta cumplir los plazos establecidos». En el caso de Vila, Torres asegura que el problema estriba en la aplicación del nuevo código técnico de la construcción y en la nueva tarea de informar las licencias de actividad, que antes dependía del Consell, así como la adaptación al PTI. «Todos estos factores, más el amplio abanico normativo, complican la redacción de los informes urbanísticos», justifica.

«Investigación» en Sant Antoni

El Ayuntamiento de Sant Antoni admite los retrasos, pero su alcalde, José Sala, ve «exagerada» la denuncia del Colegio de Arquitectos. En todo caso, Sala manifiesta no ser consciente de que en su municipio se produzcan tantas demoras como dicen los arquitectos, salvo en el caso de las obras en suelo rústico, y que, por ello, abrirá «una investigación» para averiguar cuánto se tarda en tramitar las solicitudes de licencias de obra. El alcalde reconoce que se deberían tramitar con «una mayor celeridad» y que para paliar esta circunstancia está previsto contratar a un arquitecto (el anterior dejó su plaza hace un año). Coincide con los arquitectos en que la abundante normativa urbanística, en algunos casos incluso contradictoria, «dificulta mucho el trabajo de los técnicos».

El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, Carraca, puntualiza que en su municipio sólo se produce una demora en la concesión de licencias en suelo rústico, puesto que dependen de un informe favorable del Consell, y que, en todo caso, «no se puede considerar excesiva». No le consta que se incumplan los plazos legales. De momento, los medios humanos de los que dispone el departamento de Urbanismo son «suficientes», pero Marí no descarta que, tras la aprobación de las Normas Subsidiarias, se produzca un incremento.

Por su parte, el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, aseguró que en la actualidad el departamento de Urbanismo está al día en lo que concierne a la tramitación de autorizaciones de obras, aunque puede haber algún caso puntual que arrastre cierto retraso. También apuesta por el aumento de la plantilla, con la contratación de un segundo arquitecto, para evitar que, por ejemplo, una baja laboral o las vacaciones puedan alterar el ritmo de trabajo.

Asimismo, el concejal de Urbanismo de Sant Josep, Josep Antoni Prats, admite que la situación heredada del anterior gobierno del PP es «muy complicada» debido, sobre todo, a la falta de personal. De todos modos, Prats destaca «el esfuerzo» de los servicios técnicos para reducir la demora que se arrastraba. «Hemos mejorado mucho», dice.

«También es culpa de promotores y arquitectos»

EIVISSA / J.R. Los ayuntamientos de Eivissa, Sant Antoni y Santa Eulària coinciden al afirmar que no se pueden atribuir los retrasos en la concesión de licencias de obra exclusivamente a los servicios técnicos municipales. «También es culpa de promotores y arquitectos», manifiestan. «Hay que evaluar cada caso concreto, pero muchas veces la demora no se puede achacar sólo al Ayuntamiento. Hay arquitectos que, a pesar de conocer perfectamente la normativa, presentan proyectos con alguna deficiencia a la espera de que cuelen. Ya saben ellos que eso provoca retrasos», explica el concejal de Urbanismo de Vila, Vicent Torres, que destaca la importancia de que se sepan «todas las cosas».

En los mismos términos se expresa el alcalde de Sant Antoni, José Sala, que recuerda que muchas veces se producen demoras por causas «imputables a los promotores o a sus técnicos». «Por ejemplo, hay casos en que los promotores tardan mucho en presentar la documentación que se les requiere o solicitan una licencia con un proyecto básico y se les indica que incorporen una serie de condiciones en el proyecto de ejecución, y luego no lo hacen», explica Sala, que agrega: «No quiero hacer una valoración general porque habría que ir caso a caso para determinar por qué se ha producido un retraso». Por su parte, el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, apunta que hay que considerar «factores externos» a la hora de tratar de justificar las demoras, como las anomalías que deben resolverse sobre el camino. «Si se acumula un retraso de seis meses no se puede atribuir sólo a la dejadez o incompetencia de los servicios técnicos de un ayuntamiento», explica el primer edil.