Ciutadella: el Consell ordena la paralización de la fábrica de bloques de Son Sintas |
(Menorca, 28/03/2007)
El empresario Valeriano Allès, que explota la cantera y la planta, no permitió el paso a los inspectores, sin orden judicial. Afirma que tiene licencia y que la competencia es municipal
J.B.Ciutadella
El Consell ha ordenado a la empresa Valeriano Allés Canet SL que paralice la actividad de la fábrica de bloques de hormigón adjunta a la cantera de Son Sintas. La resolución del expediente de diciplina urbanística fue comunicada al empresario hace un mes, aproximadamente. La planta recibió después otra visita de los inspectores insulares para confirmar que la orden había sido acatada y que la producción se había interrumpido. De hecho, Valeriano Allés ha firmado un documento en el que reconoce que ha paralizado la fabricación de bloques de hormigón, en cumplimiento de la orden del Consell. El empresario exhibió a los inspectores la licencia municipal de obras, que consiguió el año pasado, relativa a la construcción de la nave donde se producen los bloques. Entiende que el expediente de disciplina urbanística se refiere exclusivamente a la obra de construcción y no a la actividad y asegura que la planta dispone de todas las autorizaciones.
Valeriano Allés apunta otro argumento para cuestionar la actuación del Consell con la orden de paralización. Se refiere a una ley de acompañamiento de los presupuestos que traspasa las competencias en materia de instalaciones Industriales del Consell a los ayuntamientos de municipios de más de 20.000 habitantes. Concluye que la competencia relativa a la actividad de la planta de bloques de hormigón corresponde al Ayuntamiento y así lo ha hecho constar en el recurso que ha presentado al Consell.
El conseller de Ordenación del Territorio, Marc Pons, confirmó ayer la noticia sobre la orden de paralización, pero no ha querido realizar valoraciones.
Valeriano Allés justifica que no dejó entrar a los inspectores "porque la legislación de Minas establece que las personas ajenas a la empresa deben entrar acompañadas de un facultativo de Minas o bien con una orden judicial". La misma situación se produjo hace más de un año, cuando los inspectores intentaron visitar la planta de producción de bloques. Al final, el Consell tuvo que solicitar una orden judicial, que también tendrá que pedir ahora.
El conflicto sobre la planta de producción de bloques le ha llegado al Consell de rebote. Valeriano Allés Canet SL solicitó al Ayuntamiento la licencia de obras en enero de 2004, sin embargo no obtuvo respuesta. Por este motivo, el empresario acudió al Consell con la misma intención y en diciembre la institución insular le denegó el permiso. Ello motivó un recurso judicial, cuya sentencia fue favorable al Consell. Según han mantenido los técnicos de la institución insular, la fábrica de bloques no podrá legalizarse junto a la cantera de Son Sintas. La Conselleria de Marc Pons siempre se ha referido a la sentencia judicial para ratificar sus decisiones y ahora para ordenar el cese de la actividad. El Consell requirió al Ayuntamiento de Ciutadella que activara el expediente de disciplina urbanística y al no hacerlo la Administración insular se subrogó la competencia para instruir el expediente que ahora ha concluido. Mientras, el Ayuntamiento concedió licencia de obras a Valeriano Allés, por lo que el empresario afirma que la planta es legal y que la orden del Consell no tiene sentido, entre otras cosas, porque llega fuera de tiempo.
La orden de paralización no afecta a la actividad extractiva, sino sólo a la planta de bloques de hormigón.
El empresario Valeriano Allès, que explota la cantera y la planta, no permitió el paso a los inspectores, sin orden judicial. Afirma que tiene licencia y que la competencia es municipal
J.B.Ciutadella
El Consell ha ordenado a la empresa Valeriano Allés Canet SL que paralice la actividad de la fábrica de bloques de hormigón adjunta a la cantera de Son Sintas. La resolución del expediente de diciplina urbanística fue comunicada al empresario hace un mes, aproximadamente. La planta recibió después otra visita de los inspectores insulares para confirmar que la orden había sido acatada y que la producción se había interrumpido. De hecho, Valeriano Allés ha firmado un documento en el que reconoce que ha paralizado la fabricación de bloques de hormigón, en cumplimiento de la orden del Consell. El empresario exhibió a los inspectores la licencia municipal de obras, que consiguió el año pasado, relativa a la construcción de la nave donde se producen los bloques. Entiende que el expediente de disciplina urbanística se refiere exclusivamente a la obra de construcción y no a la actividad y asegura que la planta dispone de todas las autorizaciones.
Valeriano Allés apunta otro argumento para cuestionar la actuación del Consell con la orden de paralización. Se refiere a una ley de acompañamiento de los presupuestos que traspasa las competencias en materia de instalaciones Industriales del Consell a los ayuntamientos de municipios de más de 20.000 habitantes. Concluye que la competencia relativa a la actividad de la planta de bloques de hormigón corresponde al Ayuntamiento y así lo ha hecho constar en el recurso que ha presentado al Consell.
El conseller de Ordenación del Territorio, Marc Pons, confirmó ayer la noticia sobre la orden de paralización, pero no ha querido realizar valoraciones.
Valeriano Allés justifica que no dejó entrar a los inspectores "porque la legislación de Minas establece que las personas ajenas a la empresa deben entrar acompañadas de un facultativo de Minas o bien con una orden judicial". La misma situación se produjo hace más de un año, cuando los inspectores intentaron visitar la planta de producción de bloques. Al final, el Consell tuvo que solicitar una orden judicial, que también tendrá que pedir ahora.
El conflicto sobre la planta de producción de bloques le ha llegado al Consell de rebote. Valeriano Allés Canet SL solicitó al Ayuntamiento la licencia de obras en enero de 2004, sin embargo no obtuvo respuesta. Por este motivo, el empresario acudió al Consell con la misma intención y en diciembre la institución insular le denegó el permiso. Ello motivó un recurso judicial, cuya sentencia fue favorable al Consell. Según han mantenido los técnicos de la institución insular, la fábrica de bloques no podrá legalizarse junto a la cantera de Son Sintas. La Conselleria de Marc Pons siempre se ha referido a la sentencia judicial para ratificar sus decisiones y ahora para ordenar el cese de la actividad. El Consell requirió al Ayuntamiento de Ciutadella que activara el expediente de disciplina urbanística y al no hacerlo la Administración insular se subrogó la competencia para instruir el expediente que ahora ha concluido. Mientras, el Ayuntamiento concedió licencia de obras a Valeriano Allés, por lo que el empresario afirma que la planta es legal y que la orden del Consell no tiene sentido, entre otras cosas, porque llega fuera de tiempo.
La orden de paralización no afecta a la actividad extractiva, sino sólo a la planta de bloques de hormigón.
Propuesta para mejorar el acceso a la cantera
La planta de bloques de hormigón de Son Sintas ha provocado un incremento del tráfico de camiones en este punto de la carretera general. Ahora que el Consell acomete la mejora del tramo entre Ferreries y Ciutadella es urgente actuar en este punto, según el conseller Damià Borràs. El Consell está a la espera de que Valeriano Allés presente el diseño de la ordenación del tráfico en el acceso a la cantera y el empresario afirma que está terminado y se entregará en pocos días. No existen discrepancias importantes sobre la ordenación, con un carril de acceso y otro central para la entrada e incorporación de vehículos en dirección a Maó.
No hay interferencias entre este proyecto y el conflicto por la fábrica de bloques, en que el Consell se ha visto obligado a actuar ante la pasividad municipal, las sentencias judiciales, las denuncias de los propietarios de la finca y lo que considera un incumplimiento de las normas urbanísticas en suelo rústico.