Eivissa: declarada nula la caducidad de la licencia de `Blauvert´ |
(Diario de Ibiza, 31/03/2006)
El TSJB señala que el Ayuntamiento no podía declarar caducado el permiso argumentando el incumplimiento del plazo establecido para iniciar las obras
EIVISSA | REDACCIÓN
La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Balears ha dictado una sentencia en la que estima el recurso interpuesto por la empresa Promociones Urbanas Blauvert SL contra un decreto del alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, de septiembre de 2002, por el que se declaraba la caducidad «a todos los efectos» de la licencia de obra mayor para la construcción de un edificio en la calle Ramon Muntaner de Vila.
El Tribunal establece que el Consistorio ibicenco deberá mantener la validez de la citada licencia, «en lo que se refiere a la demora en la presentación del proyecto de ejecución, al ser éste el único objeto de litigio», ya que entiende que en la fecha de inicio del procedimiento de caducidad todavía no había transcurrido el plazo de seis meses que establece la ley para el inicio de las obras. Sin embargo, la sentencia no entra a valorar la legalidad del proyecto, que supondría la construcción de un edificio de 13 plantas en la zona del Puig des Molins, entre las calles Rafael Alberti y Faustino Puig Palau.
Anulada en 2002
El caso se remonta al año 2002, cuando el Ayuntamiento de Eivissa decidió anular la licencia de obra concedida a Blauvert en septiembre del año anterior, al considerar que la promotora había incumplido el plazo máximo para la presentación del correspondiente proyecto de ejecución.
La empresa acusó al Consistorio de tratar a la sociedad «de forma discriminatoria», al no concederle, según señalan en su argumentación, un trámite previo para subsanación de la deficiencia temporal que justificó la caducidad de la licencia.
En enero de 2002, la obra se vió afectada por la paralización decretada por el Consell Insular, que inició el proceso para declarar el Puig des Molins como Bien de Interés Cultural.
Tras el levantamiento de la moratoria por parte de la máxima institución insular, en marzo de 2004, la promotora solicitó al Ayuntamiento la revisión de la licencia de edificación del citado inmueble, pero Vila denegó el permiso solicitado por Blauvert al considerar que la obra incumplía la normativa urbanística vigente en la ciudad porque, entre otros aspectos, rebasaba en un 20% los volúmenes de edificación permitidos en es Puig des Molins. Según los informes técnicos del Consistorio, la obra tampoco se adaptaría a una serie de normas del PTI.
El Ayuntamiento ibicenco aprobó en mayo de 2005 suspender la concesión de licencias de edificación y parcelación de terrenos en la zona al iniciar la redacción de un Plan Especial que regule el desarrollo urbanístico del Puig des Molins.
El TSJB señala que el Ayuntamiento no podía declarar caducado el permiso argumentando el incumplimiento del plazo establecido para iniciar las obras
EIVISSA | REDACCIÓN
La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Balears ha dictado una sentencia en la que estima el recurso interpuesto por la empresa Promociones Urbanas Blauvert SL contra un decreto del alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, de septiembre de 2002, por el que se declaraba la caducidad «a todos los efectos» de la licencia de obra mayor para la construcción de un edificio en la calle Ramon Muntaner de Vila.
El Tribunal establece que el Consistorio ibicenco deberá mantener la validez de la citada licencia, «en lo que se refiere a la demora en la presentación del proyecto de ejecución, al ser éste el único objeto de litigio», ya que entiende que en la fecha de inicio del procedimiento de caducidad todavía no había transcurrido el plazo de seis meses que establece la ley para el inicio de las obras. Sin embargo, la sentencia no entra a valorar la legalidad del proyecto, que supondría la construcción de un edificio de 13 plantas en la zona del Puig des Molins, entre las calles Rafael Alberti y Faustino Puig Palau.
Anulada en 2002
El caso se remonta al año 2002, cuando el Ayuntamiento de Eivissa decidió anular la licencia de obra concedida a Blauvert en septiembre del año anterior, al considerar que la promotora había incumplido el plazo máximo para la presentación del correspondiente proyecto de ejecución.
La empresa acusó al Consistorio de tratar a la sociedad «de forma discriminatoria», al no concederle, según señalan en su argumentación, un trámite previo para subsanación de la deficiencia temporal que justificó la caducidad de la licencia.
En enero de 2002, la obra se vió afectada por la paralización decretada por el Consell Insular, que inició el proceso para declarar el Puig des Molins como Bien de Interés Cultural.
Tras el levantamiento de la moratoria por parte de la máxima institución insular, en marzo de 2004, la promotora solicitó al Ayuntamiento la revisión de la licencia de edificación del citado inmueble, pero Vila denegó el permiso solicitado por Blauvert al considerar que la obra incumplía la normativa urbanística vigente en la ciudad porque, entre otros aspectos, rebasaba en un 20% los volúmenes de edificación permitidos en es Puig des Molins. Según los informes técnicos del Consistorio, la obra tampoco se adaptaría a una serie de normas del PTI.
El Ayuntamiento ibicenco aprobó en mayo de 2005 suspender la concesión de licencias de edificación y parcelación de terrenos en la zona al iniciar la redacción de un Plan Especial que regule el desarrollo urbanístico del Puig des Molins.