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Bitàcora sobre la disciplina urbanística a les Illes Balears | ![]() |
La Fiscalía de Medio Ambiente denuncia el vertedero de neumáticos en Sencelles(El Mundo, 30/06/2007)El fiscal ve indicios de delito ambiental / El juez dicta que los ex trabajadores que desmantelaron el lugar fueron despedidos de forma improcedente MIREYA ROURA SENCELLES.- La Fiscalía de Medio Ambiente ha denunciado el vertedero de neumáticos de Sencelles. Así informó ayer el representante de este Ministerio Público, Adrián Salazar, quien investiga a la sociedad Unión de Reciclaje de Baleares por un presunto delito ambiental al haber acumulado toneladas de neumáticos junto a un pinar sin las preceptivas licencias. Paralelamente, el juzgado de lo Social número 1 de Palma ha dictaminado que esta sociedad despidió de forma improcedente a los dos ex trabajadores que se encargaron de desmantelar el polvorín, a instancias de la Conselleria de Medio Ambiente y bajo advertencia de una multa de 300.000 euros. La sentencia dicta que la sociedad demandada deberá indemnizar a los dos ex empleados con 150 euros o bien readmitirlos en la empresa. Además, el magistrado Juan Jiménez Vidal condena a Unión de Reciclaje de Baleares a abonarles los salarios que dejaron de percibir desde el 11 de noviembre de 2006, el día siguiente al despido, hasta la notificación de la sentencia, con descuento de los días que los afectados trabajaron en otra empresa. Riesgo de incendio Una fotografía aérea realizada por este diario en agosto de 2006 puso al descubierto que la antigua fábrica de calzado de Sencelles albergaba toneladas de neumáticos que se amontonaban junto a un pinar de considerables dimensiones; lo que suponía un riesgo evidente de incendio. Tras confirmar que el polvorín carecería de toda licencia municipal, la Conselleria de Medio Ambiente abrió un expediente sancionador a Unión de Reciclaje de Baleares y la conminó a presentar un plan de acción para retirar todos los escombros de la parcela. Fue entonces cuando entraron en juego los dos trabajadores despedidos de forma improcedente. Fueron los encargados de apilar y trasladar los neumáticos sistemáticamente. Y lo hicieron bajo la promesa de 1.000 euros al mes y de que serían asegurados. Sin embargo, un mes y medio después se dieron cuenta de que todo era papel mojado. Ni recibieron la parte convenida, ni fueron asegurados. No obstante, y ante la necesidad de dinero, continuaron sustentados con más promesas. El 11 de octubre se encontraron con que un nuevo candado les vetaba el acceso a la finca. «El dueño nos amenazó con que iba a pagarnos dos veces», explicó uno de los trabajadores. Los planes de este propietario pasaban por exportar los neumáticos en mejores condiciones para su uso en la República Dominicana y Mauritania, donde, al parecer, se los pagaban a un euro y medio la unidad. Asimismo, el dueño dijo haber contactado con un químico chileno que necesitaba financiar su proyecto de reconversión de neumáticos en caucho, que se puede usar como aislante, impermeabilizante o como suela de zapato. Al final, no sólo el lugar fue restituido a su situación inicial, sino que el vertedero seguía recibiendo escombros. El propietario había desoído los plazos administrativos y no había presentado este proyecto a la Conselleria. Precisamente, este administrador ya había sido expedientado por explotar otro vertedero ilegal de neumáticos en Algaida. Frente a esta situación, el departamento que todavía dirige Jaume Font, conseller en funciones, impuso una multa de 58.000 euros a la sociedad por una infracción grave de la Ley de Residuos. Sin embargo, la Conselleria consideró que los hechos podían incurrir en un delito ecológico e iba más allá de una mera sanción administrativa; por lo que elevó el caso a la Fiscalía. Escondido Toda esta larga tramitación se ha complicado por la imposibilidad tanto de la Conselleria de Medio Ambiente como del Ayuntamiento de Sencelles de contactar con algún administrador de la empresa. El propietario ha estado escondiéndose de la Administración y de los ex trabajadores durante un largo periodo de tiempo. Por otra parte, el reciclaje de vehículos y de sus neumáticos es un proceso costoso y sólo reglado por la Administración desde el pasado 1 de enero de 2004. De hecho, la Dirección General de Tráfico no da nunca un vehículo de baja a menos que disponga del certificado de descontaminación del automóvil. Para conseguirlo, el propietario del coche, moto o camión debe dirigirse a una de las empresas acreditadas por la Administración para efectuar la descontaminación del vehículo, que consiste básicamente en extraer del automóvil todos los líquidos y materiales contaminantes. |