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Bitàcora sobre la disciplina urbanística a les Illes Balears | ![]() |
El Consell denuncia ante Fiscalía la existencia de 13 vertederos ilegales(Diario de Mallorca, 12/10/2006)La mayoría de estos lugares son utilizados de forma habitual para depositar residuos de construcción y demolición ARACELI BOSCH. PALMA. El Consell de Mallorca ha denunciado ante la Fiscalía, el Seprona de la Guardia Civil y la conselleria de Medio Ambiente la existencia de 13 vertederos ilegales que se usan habitualmente para depositar residuos de construcción y demolición sin pasar por los cauces regulares. Los responsables insulares han enviado información detallada del funcionamiento de estos emplazamientos: localización, fotografías aéreas, y cómputo de la entrada y salida de camiones que depositan allí el material de derribo y de restos de construcción. Estos vertederos ilegales están localizados en los siguientes municipios: Sencelles, Banyalbufar, Sineu, Campos, Sóller, Muro, Santa Margalida, Artà, Petra, Selva y Calvià. "Tiran residuos sin limpiar y sin descontaminar", en palabras del director insular Guillem Riera, quien entiende que en estos casos se están produciendo graves incumplimientos tanto de la legislación de ordenación territorial como del medio ambiente, sobre todo, de la ley de residuos y de licencias de actividades en suelo rústico. Muchos de esto lugares son canteras en desuso cuyos propietarios tienen la obligación de restaurar. Según la ley, una cantera inactiva se debe recomponer con desmontes, tierra y con residuos de construcción y demolición procedentes de plantas de tratamiento. En cambio, la gran mayoría del material que se deposita allí no se ha descontaminado previamente por lo que se mezclan en el mismo lugar desde electrodomésticos a botes de pinturas o disolventes. Todo se tapa con tierra y se olvida. Negocio clandestino Según el director insular de Residuos, a pesar de la normativa se está generando un negocio clandestino alrededor de estos vertederos que actúan presuntamente al margen de la legalidad. "Entran, dejan el material y muchas veces sin facturas de por medio", asegura. "Un transportista tiene más margen si lo lleva a una planta ilegal". Tanto los productores de residuos como los transportistas tienen que seguir una serie de obligaciones reguladas en el plan director sectorial de residuos que entró en vigor en febrero. Los productores, por ejemplo, antes de la obra deben evaluar el volumen y el tipo de residuos que originarán, detallar medidas de separación, valorar el coste de la gestión de estos residuos, depositar una fianza del 125% del coste de la gestión, asumir el coste y formalizar un contrato con la adjudicataria Mac Insular. Después deben entregar los residuos a un transportista registrado que tiene que entregárselos a Mac. El resultado de esta normativa, según Riera, podrá evaluarse dentro de uno o dos años, cuando terminen las obras. Pero, de momento, asegura que se están incumpliendo muchos trámites como demuestra la existencia de los vertederos clandestinos denunciados. El Govern ha abierto este año por vertidos de residuos 14 expedientes sancionadores |